miércoles, 2 de febrero de 2011

Galletas de canela

Me apetecía hacer algo dulce y, de paso, utilizar el súper molde para galletas que me compré en Jerusalén.

Esta receta de galletitas de canela que encontré en Tu cocina fácil me vino al pelo porque no sólo eran sencillas de preparar, sino que además -y casi más importante- tenía todos los ingredientes en casa.

Así que me puse manos a la obra. Después de mezclar todos los ingredientes, paso por paso, meto la masa en el frigo y ajusto la alarma del móvil para dentro de 30 minutos. 

Perfecto. 

En algún momento, mientras veía el último capítulo de Pretty Little Liars -sí, sigo enganchada- me di cuenta de que ¡¡NO HABÍA AÑADIDO EL HUEVO!!. 

Definitivamente, tengo un problema: no es la primera vez que me ocurre. Ya quise hacer una vez la tarta de zanahoria sin huevos (¡y eso que lleva 4!) y un bizcocho con poco más que sólo harina. 

En fin. 

Miro el reloj: han pasado ya 15 minutos. Salgo pitando al frigorífico, saco la masa y le añado el dichoso huevo. La vuelvo a meter al frigo y la dejo otra media hora, por si las moscas. 


Cuando la saco y me pongo a querer moldear, no hay forma: aquello no tiene consistencia ninguna. Añado un poco más de harina... mmm... ahora un poco mejor. Vuelvo a intentar el molde: nada. Más harina. Amaso. Se vuelve a quedar pegajosa. Otro poco de harina. 

Ya verás - pienso para mí- con tanta harina no va a haber quién se coma esto. 

Al final ya lo consigo y tengo galletitas súper monas dispuestas para entrar al horno y dorarse. 

Nada más meterlas al horno.
Lo que parece tostadito, en realidad es la canela espolvoreada.




No sé por qué pensé que las galletas no aumentaban de tamaño por ser precisamente eso: galletas. Cosas de principiante, supongo. El caso es que cuando las galletas estaban en su punto, las saqué del horno y así es como aparecieron:


¡Sin forma alguna!





Pero bueno, a pesar de haber olvidado el huevo, de haber las galletas doblado su tamaño, haberse pegado unas a otras y perder totalmente ese diseño que tanto me gustaba... ¡la verdad es no quedaron nada malas!.

Me acabo de merendar dos con un café   :p

No hay comentarios:

Publicar un comentario

¿Y tú qué piensas?