domingo, 30 de enero de 2011

Marrakech, ese lugar ENCANTADORAMENTE tranquilo

Me he levantado tarde, a las 11, hora de aquí. Parece que el no tener cortinas sigue sin afectarme. La verdad es que no lo entiendo.

Me he preparado una enorme taza de café (gracias, Miriam!) y dos tostadas, y mientras engullía el desayuno e ignoraba el ruido de fuera, me he puesto a echar un ojo a la revista que compramos el otro día - What's On, Dubai Edition -. Este número viene con una guía de los mejores restaurantes en Dubai y Abu Dhabi.

He empezado, por casualidad, por Cocina Internacional. La selección es extensa: Oriente Medio, Europa, Asia, India & Pakistán, de "Las Américas"...

Después de ver el Ribs Room y pensar al mismo tiempo en Pedro Picapiedra (os acordáis de aquel enorme costilar de dinosaurio tumbando el coche, no?) y en Lutfi (con lo que le gustan las costillas, bien podría hacer de Pablo acompañando a Pedro en el banquete), he ido a parar a la reseña del restaurante Marrakech.

Traducido, más o menos diría esto:

"No sólo prepara una excelente comida del norte de África, desde el cuscús a la bastela, sino que, además, la atmósfera aquí es tan encantadoramente tranquila y mágica que pensarás que acabas de poner tus pies en la plaza de Jemaa El-Fnaa".

Alucino. 

Lo de mágica, vale, pero ¿lo de "encantadoramente tranquila"? ¿EN SERIO?.

Una de dos: o visitaron la plaza un día de diario en pleno agosto, a las 12 de la mañana coincidiendo con el mes de Ramadán, ¡o es que no han visitado la plaza en su vida!.

¿Qué hay de la gente agolpándose entre los puestos, los camareros saliendo a tu encuentro desde cualquier lugar, menú en mano, para que comas en su chiringuito, los músicos, los humos, los amigos del roce, las luces, los puestos de naranjas gritando "3 dirhams, 3 dirhams!!", LA PRIMA!!??

Dios mío, después de leer esta reseña, ¡no sé si creerme lo que pone en el resto de la guía!.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

¿Y tú qué piensas?